martes, 8 de marzo de 2022

Prólogo

En algunas ocasiones, estando en un parque, en la fila de un supermercado, en una conversación de amigos, en una salida a la cumbre de una montaña, o en las sillas de la sala de espera de algún aeropuerto, yo me dispuse a escuchar algunas conversaciones ajenas. Me sorprendí del tipo de diálogos y especialmente de las respuestas simples pero contundentes que muchas personas tienen ante ciertas situaciones y dilemas complejos; elogié la gran sabiduría que pulula por todas partes; y agradecí por la existencia de muchos seres inteligentes por ahí que podrían remediar las atribulaciones del mundo en tiempo récord; pero me lamenté al descubrir que el temor reinante en sus corazones impedía que sus ideas fueran puestas en práctica.

Yo también tengo mis ideas respecto de ciertos dilemas, también me han preguntado y también he tenido que responder lo que pienso de ciertos temas, y también me han faltado agallas para iniciar algunas acciones que yo podría efectuar porque, al igual que una inmensa mayoría, estoy lleno de excusas para ocuparme de intereses más triviales. Espero que escribir, al menos, no sea uno de esos intereses vanos.

Hubo ciertas conversaciones difíciles, pero entretenidas y significativas, de las que he sido testigo o partícipe, en las que también queda explicado por qué el mundo sigue enredado en sus complejidades y a la deriva, alentando el pesimismo y la desidia en las personas, postergando y desacelerando las posibilidades de propiciar un lugar más agradable para todos.

Varios de los lectores se reconocerán a sí mismos en estos diálogos porque todos los personajes son de la vida real, pero gozan en su gran mayoría del amparo del anonimato. Algunos se reirán en la intimidad de esta lectura y otros tal vez se molestarán porque creerán que debieron ser consultados y no ser expuestos, pero ninguno de nosotros es perfecto y tengo la sensación de que, aunque sea común que muy pocas personas aprendan de la experiencia ajena, a veces es conveniente conocer acerca de las aflicciones personales de otros para, al menos, ser más agradecido con la vida que nos correspondió vivir. O la que elegimos, pero que no recordamos por qué lo hicimos, o con qué finalidad.

Según yo: “ya es mañana” porque en la teoría ya está explicado cómo debemos actuar ahora para que mañana sea un día mejor. Mañana es un resultado determinado ya con las acciones de hoy, faltando solamente que sean las acciones más acordes con los resultados positivos que queremos lograr. Comparto entonces estos diálogos, elegidos intencionalmente, para que algunos por ahí sepan lo que otros piensan y expresan. Pudiera ser que lo que acá queda escrito sea motivo de inspiración para algunos y signifique un cambio positivo en sus vidas.

Quedaría entonces encaminada, sobre una pequeña muestra de conversaciones seleccionadas, la explicación acerca de cómo, gracias a la visión particular de muchas personas anónimas por ahí, se comenzó a gestar la manifestación de aquel relato según el cual: “El mundo ya no está al revés”.

Indice

 Prólogo

¿El mundo sigue al revés?. 7

La espiral de la violencia. 11

Creciendo sin consciencia. 15

Aurora y Vladimir 17

Lo que más abunda en el planeta. 21

No más flores por favor 25

De paseo a un lugar no deseado. 29

Preferible renunciar al concierto. 33

La escuela de la vida. 37

¿Qué se sentirá hacer de mula?. 39

Volando en primera clase. 41

Presidente puede ser cualquiera. 43

Las fuerzas de orden público. 47

Las granjas urbanas. 51

El juego de la crema dental 55

Antihigiénico y antiecológico. 57

Agua, leche y petróleo. 61

Viviendo lejos de la gran ciudad. 65

La pregunta del futbolista. 69

El dilema de un profesor 71

Nadie sabe para quién trabaja. 73

El llamado de la montaña. 77

Lecciones cerro arriba. 81

Todo libro espera su lector 85

Para leer al menos dos veces. 89

¿La palabra de Dios?. 93

¿Creyente, agnóstico, o ateo?. 97

Nadie más cerca de dios que un ateo. 101

Es como rarito, pero ¡qué importa! 105

Nadie necesita un psicólogo. 109

Aquel payaso incomprendido. 113

Qué pareja más dispareja. 117

Si yo pudiera regalarte algo. 119

Deseos absurdos por un harem.. 123

Otra madre con sueños frustrados. 127

No te desesperes Pérez. 131

Un mundo sin animales. 135

Vivir afuera de la Tierra. 139

Comiendo pollo un viernes santo. 143

La segunda venida del mesías. 145

Esas cosas del más allá. 149

Lejos de las fraternidades. 153

El significado de la palabra humildad. 157

El niño del Wamani 159

Enfócate en tu misión. 163

Epílogo. 166

 

Prólogo

En algunas ocasiones, estando en un parque, en la fila de un supermercado, en una conversación de amigos, en una salida a la cumbre de una m...